Si vamos de visita a la ciudad de Pretoria, hay un monumento muy interesante que no debemos dejar de conocer, que es el Monumento Voortrekker. Este se encuentra ubicado en la zona suroeste de la ciudad y es un símbolo de valor y coraje para honrar a los pioneros. Este monumento ha sido construído en el año 1940 con el objetivo de conmemorar la victoria del año 1838 de los Bóers sobre los Zulúes en el Blood River.
El monumento es un imponente bloque de granito que tiene una altura de unos 40 metros y una base cuadrada con lados que también miden 40 metros. Fue diseñado por el arquitecto Gerard Moerdijk, y está ubicado estratégicamente en la cima de una colina para que pueda verse desde casi toda la ciudad.
En su interior están expuestos interesantes relieves representando la “Gran Migración”, y los principales puntos de interés que tiene son el cenotafio y el friso. La entrada del edificio conduce a la llamada Sala de los Héroes. Este espacio tiene un friso hecho de mármol que mide unos 92 metros de largo y 2.3 metros de alto, con un peso de 180 toneladas, lo que convierte este friso en el más grande del mundo. Cuenta con 27 bajorrelieves que cuentan la historia del Gran Trek, la forma de vida y de trabajo, y las creencias de los voortrekkers.
Por su parte el cenotafio es el punto central del monumento, y cada 16 de diciembre a las 12 del mediodía, que fue la fecha en que se libró la batalla del Blood River, el sol entra por una apertura en la cúpula y es iluminado el cenotafio, donde se encuentran escritas las palabras Ons vir Jou, Suid-Afrika (Nosotros por tí, Sudáfrica). Este rayo de sol tiene el significado de la bendición divina en la vida y esfuerzo de estos voortrekkers.
El monumento está situado en una reserva natural, donde se puede encontrar un área para meriendas, senderos para hacer caminatas o paseos en bicicleta. También se puede ir a almorzar en el restaurante o visitar el hermoso jardín de platas autóctonas.